Seguro que usáis una tarjeta de memoria. En la cámara de fotos, en el portátil o en el lector de ebooks. Y si no, seguro que usáis lápices USB para transportar vuestros documentos. Pero ¿cómo se hacen? ¿Es un proceso sencillo? Nada más lejos: se necesitan chips de silicio laminado que ha de ser tratado en habitaciones 100 veces más limpias que un quirófano. Producir un chip cuesta aproximadamente un mes. Luego los chips se envían a Asia para que puedan ser ensamblados con el resto de piezas. Para algunas conexiones del chip con las placas del circuito se usan cables de oro puro. Luego, tras haber montado todas las piezas las tarjetas o los lápices USB se prueban uno por uno. Y seguro que me dejo cosas de explicar. Lo mejor es que veáis vosotros el vídeo. A mí me ha dejado con la boca abierta.
Visto en Microsiervos